La Conferencia del Episcopado Mexicano expresó este jueves su profundo dolor y empatía con las víctimas de la explosión de la pipa de gas ocurrido este 10 de agosto de bajo del puente de La Concordia, ubicado en la alcaldía Iztapalapa, Ciudad de México.
Hasta la última actualización de datos, se han registrado 8 muertos y 94 heridos a causa de la explosión.
“Como pastores de la Iglesia de México, elevamos nuestras oraciones al Señor de la Vida por el eterno descanso de quienes han partido a la Casa del Padre, pedimos también por la pronta recuperación de los heridos”, señaló Conferencia del Episcopado Mexicano en un comunicado.
“Queremos hacer llegar nuestra palabra de consuelo y esperanza a los hermanos que hoy sufren por la pérdida irreparable de sus seres queridos. Les acompañamos con la certeza de la fe en Cristo resucitado, que es «consuelo en la tribulación y esperanza que no defrauda» (cfr. Rm 5,5)”.
Bertha María Alcalde Luján, fiscal general de Justicia de la Ciudad de México, informó que el exceso de velocidad es la posible causa de la explosión de la pipa de gas en la alcaldía Iztapalapa.
Asimismo el Episcopado reconoció el esfuerzo de los cuerpos de emergencia, de las autoridades civiles y de ciudadanos solidarios en respuesta a este lamentable suceso.
“Invitamos a todos a mantener viva la unidad y la colaboración ante este doloroso acontecimiento”.
La Iglesia reiteró su compromiso de cercanía con los más vulnerables y de acompañamiento en este momento de prueba, recordando que la caridad cristiana se hace concreta en la ayuda fraterna y en la oración perseverante, concluyó el documento firmado por Obispo de Cuernavaca y Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Ramón Castro Castro, y el Obispo Auxiliar de México, Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Héctor M. Pérez Villarreal